La Justicia levanta la feria para tratar el pedido de la CGT contra el DNU

La sala de feria de la Cámara Nacional de Apelaciones del Trabajo definió este martes habilitar el receso judicial para tratar el recurso presentado a fin de año por la CGT

La sala de feria de la Cámara Nacional de Apelaciones del Trabajo definió este martes habilitar el receso judicial para tratar el recurso presentado a fin de año por la CGT contra el decreto de necesidad y urgencia 70/2023 emitido por el Gobierno de Javier Milei que cambia las condiciones de contratación laboral en el país.

La resolución, firmada por los camaristas María González y Alejandro Subera, atendió el pedido de la CGT, firmado por su secretario general Héctor Daer, para que se levante la feria y se evalúe el pedido de suspensión del decreto de necesidad y urgencia.

En el primer punto de la petición, la CGT solicitó que “se decrete la medida cautelar solicitada de suspensión de la aplicación del Título IV Trabajo del Decreto de Necesidad y Urgencia Nº 70/2023”.

En la misma resolución, los jueces González y Subera trasladaron el expediente al Ministerio Público Fiscal para que emita un dictamen.

“Esta Sala considera que, frente a las particularidades del caso, lo traído a consideración amerita la apertura de la habilitación de la feria judicial solicitada, lo que así se resuelve”, señalaron los camaristas.

La decisión de la Justicia se da en medio de los intentos de negociación del Gobierno con la CGT con la intención de levantar el paro general de 12 horas al que el 28 de diciembre llamó la central de los trabajadores para el próximo 24 de enero. Ese día habrá una movilización al Congreso.

En medio de la tensión entre la administración de Mieli y los gremios, el vocero presidencial Manuel Adorni dijo este martes que el diálogo con la central obrera “está abierto”, pero puso condiciones para negociar.

“Los canales de diálogo están abiertos de manera permanente y todos los que quieran una Argentina ordenada, libre, segura y con crecimiento están invitados al diálogo. No termino de entender esto de negociar para ir adelante, para atrás”, dijo Adorni cuando le preguntaron si existía la posibilidad de avanzar en negociaciones con la CGT.

Y agregó que en la discusión con la CGT “lo que no se negocia es la Argentina libre, no se negocia el querer salir del 50% de pobres, querer terminar con la indigencia y no se negocia querer salir de los salarios miserables”.

Este lunes, Héctor Daer, uno de los líderes de la CGT, había puesto en duda la posibilidad de un encuentro con el presidente Javier Milei, una alternativa deslizada al filo del fin de año desde la Casa Rosada en una apuesta por intentar contener la escalada en la disputa con la central obrera tras la convocatoria a un paro general por el megadecreto y la ley ómnibus que el Gobierno envío al Congreso.

La posición de la jefatura sindical no sorprendió en medio de los fuertes cruces que se sucedieron en la víspera del festejo de año nuevo y que tuvieron como protagonista a Federico Sturzenegger, el arquitecto del DNU que firmó Milei para desregular la economía, quién acusó a la CGT de “negociar con la dictadura militar”.

Primero el propio Daer y luego toda la central, a través de un comunicado oficial, repudiaron los dichos de Sturzenegger y le exigieron que se retracte. “Cruzaste todos los límites”, le apuntó el jefe sindical.

Tras ello, Daer tomó distancia de una posible reunión con el Presidente, como deslizaron desde el entorno más próximo a Milei. “Hoy no tenemos convocatoria, nadie nos llamó. Y no tenemos garantías de que el Gobierno esté realmente dispuesto a moverse de nada (de lo que planteó en el DNU)”, afirmó el sindicalista en diálogo con Clarín. Y rechazó cualquier posibilidad de que la CGT evalúe revisar el llamado al paro general: “Ellos son los que tienen que recalcular, no nosotros”.

El reciente paro convocado por la CGT fue el más rápido que se le hizo a un Presidente desde el regreso de la democracia en Argentina. Hasta ahora, la huelga más rápida contra un Gobierno había sido a Fernando de la Rúa, el 5 de mayo de 2000, en rechazo a la reforma laboral y la política económica. Lo hizo solamente la CGT disidente de Hugo Moyano, en tiempos de división con la oficial de Rodolfo Daer.

En este caso, el paro fue anunciado a 18 días de la asunción y, según lo previsto, habrán pasado 45 días del 10 de diciembre cuando se concrete.